De vez en cuando, estudiantes y muchas personas me piden que opine sobre sus obras, etc. Y yo, en general, declino la petición. Esto puede parecer extraño, y a algunas personas, incluso, les puede molestar, aunque no sea esa mi intención.
Tengo varios motivos para actuar así. El primero es que a lo largo de mi vida he conocido a muchos artistas y profesores de arte. Y desgraciadamente algunos de ellos disfrutan, realmente, despreciando y sacando faltas de los estudiantes y aficionados, que se acercan a ellos en busca de consejo. He visto a profesores de arte, sin el más mínimo atisbo de talento, criticar a estudiantes hasta hacerlos llorar. Algunos artistas piensan de sí mismos que son «el mejor artista que hay y habrá» y por tanto, cualquier comentario que hacen sobre las obras de otros es siempre «desde lo alto de su pedestal» y por tanto todo lo que ven les parece inferior de un modo u otro. A mi, todo esto, me da vergüenza ajena.
Creo que todo estudiante y persona de verdad interesada en aprender arte, debe, ante todo, buscar su propio avance, comprensión y aprendizaje.
El arte es en sí mismo y por definición: Infinito. Por lo tanto, nunca puede ser comprendido ni aprendido en su totalidad por nadie.
¿Qué quiere decir esto aplicado al tema de esta entrada? Pues que lo que para «un maestro» es una basura, para otro puede ser una otra genial, y ninguno tendrá de verdad la respuesta absoluta aunque lo pretendan.
El propio artista debe ser muy consciente de su trabajo, él sabe y debe saber si la obra que ha realizado cumple con lo que pretendía en un principio, si le provoca las sensaciones que buscaba, o si el resultado le satisface.
La opinión de los demás es importante, sin duda, y se puede aprender mucho de las opiniones de personas que no saben nada de arte también, ya que hablan desde las sensaciones puras y no desde los conocimientos, y el arte, es sobre todo: Sensaciones.
Cuando os aproximéis a un maestro o un artista buscando saber, buscando consejo, preguntad abiertamente cómo se hace esto o aquello. El artista os lo dirá o no, eso no lo se, pero su respuesta os será más útil que si se pone a criticar vuestro trabajo, que no os va a ayudar en nada.
Creed en vosotros, en vuestros trabajos. Analizadlos y pensad si lo que veis y os hace sentir es suficiente, bueno, o incluso magnífico, o por el contrario, no os gusta nada. No seáis hipercríticos tampoco. Cuando algo no os ha salido bien o no os convence podéis hacer dos cosas: La primera, tiradlo y empezad otro trabajo (no es ningún drama y todos los artistas lo hacen de vez en cuando). La segunda es que guardéis vuestra obra unos días, y luego volved a verlo, y ya veréis cómo se os ocurren otras perspectivas, ideas para mejorarlo, o simplemente, decidís tirarlo! eso no lo sabéis.
Espero que de hoy en adelante aumentéis exponencialmente vuestra confianza en vosotros mismos y vuestras obras. No os dejéis intimidar por nadie, y sí: Pedid ayuda para aprender a hacer lo que no sabéis, pero no intentéis que otros averigüen qué es lo que se os da mal, averiguadlo vosotros y pedid o buscar la información.
Un saludo a todas y todos.
José Manuel Gallego Garcia.